Como todos sabemos, en el 2022 se iniciará el proceso para elegir al próximo gobernador de Oaxaca, para lo cual el 10 de Noviembre de 2021 se inició el prerregistro de los candidatos del partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena), los cuales tuvieron como fecha límite el 12 del presente para poder inscribirse, entre ellos, aspiran 12 políticos, varios de los cuales, no tienen aceptación alguna en el pueblo oaxaqueño por sus malos resultados al frente de los cargos que tienen o han tendido y, otros, porque no han hecho carrera política en el estado.
Las principales figuras registradas son las siguientes: El director general del ISSSTE, Luis Antonio Ramírez Pineda; el presidente municipal saliente de Oaxaca de Juárez, Oswaldo García Jarquín; la diputada federal y presidenta de la Comisión de Pueblos Indígenas del Congreso de la Unión, Irma Juan Carlos; la senadora Susana Harp y su compañero de bancada Salomón Jara; Alberto Esteva, exalcalde de Álvaro Obregón, en la Ciudad de México; el diputado federal Daniel Gutiérrez Gutiérrez; entre otros.
Finalmente, los órganos de selección de Morena, aceptaron las precandidaturas de 4 de ellos: Salomón Jara, Susana Harp, Armando Contreras e Irma Juan Carlos.
Dentro de todos los aspirantes registrados, los más polémicos, son El senador Salomón Jara, acusado del desvió de miles de millones de pesos durante el gobierno de Gabino Cue Monteagudo, quien además lo protegió abiertamente para evitar que fuera enviado a prisión, porque de una docena de programas asistenciales destinados al campo, finalmente no llegó ninguno a las comunidades de Oaxaca, pero el funcionario entregó informes hechos a modo y justificó sus acusaciones sin que pasara a mayores el asunto; a su vez, la Senadora Susana Harp Iturribarría, de la cual se menciona que se apuntó por Morena pese a estar ligada a grupos de derecha, conservadores y panistas, además, de que hay una lista de personajes nefastos que la acompañan y que han sido acusados de saqueo de las arcas del erario y de abuso de poder, como Flavio Sosa Villavicencio que “incendió” Oaxaca en 2006 por órdenes de grupos opositores a Ulises Ruiz, bajo las siglas de la APPO.
Pues bien, este es el abanico de personajes entre los cuales tendremos que escoger a quien sustituirá al actual gobernador, Mtro. Alejandro Murat Hinojosa, de entre los cuales, destacan los dos mencionados y entre éstos, la Senadora Susana Harp. Es un secreto a voces que cualquiera que sea el candidato de Morena, será el próximo gobernante, tan flaca está la caballada en la oposición y tan pocas personalidades conocidas por sus resultados tiene el morenismo, que los oaxaqueños tenemos que escoger entre lo menos peor que se nos presenta.
Sin embargo, dados los tiempos que vivimos en el país y en nuestra entidad, tan difíciles por la crisis económica generalizada y potenciada por la pandemia, en éste que es uno de los estados más pobres del país, estas candidaturas nos auguran tiempos aún más difíciles, tiempos de políticas públicas que estarán supeditadas a los designios de Palacio Nacional, regidas por los deseos del “Mesías” de la 4 T, cuyos rasgos esenciales ya conocemos.
Por ejemplo, se ha visto ya que privilegia las obras faraónicas destinadas a impulsar el negocio de los empresarios y no de las capas populares, como lo demuestra la asignación de miles de millones de pesos a obras como el Corredor Interoceánico o el Tren Transítsmico, mientras a las comunidades las engaña con recursos para sus carreteras que solo alcanzan para caminos artesanales que en pocos meses quedan inservibles, o por ejemplo, con el recorte presupuestal a Oaxaca, que redunda en despidos masivos y la poca inversión en los Servicios de Salud.
Ante esto, los oaxaqueños debemos empezar por prepararnos para tiempos de carencias y de poca atención a las demandas sociales, con la negativa de atender a los ciudadanos representados y encabezados por las organizaciones sociales, a las cuales el presidente les ha declarado la guerra, incluso a las que lo apoyaron en su carrera por la presidencia de la república.
Por tanto, urge tomar conciencia que ha llegado la hora de que las organizaciones sociales se unan para defender los legítimos derechos de sus agremiados y, formar así una fuerza social tan grande que evite que nuestro estado sea gobernado con prejuicios y autoritarismo. Por su parte, para el resto de los ciudadanos, ha llegado la hora de hacernos a un lado los prejuicios hacia estas organizaciones, porque es necesario que participen y exijan a éstas que legitimen sus métodos de lucha y sus demandas, para convertirse en instrumentos genuinos para la defensa de los derechos constitucionales de todos los oaxaqueños.
Porque Morena no es la solución a la pobreza que nos aqueja, sino la desesperanza que traen consigo las pruebas de los gobiernos morenistas cuyos resultados ya conocemos. ¡Vale!
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