Muchos mexicanos y sobre todo los de la clase trabajadora no se dan cuenta o no se explican por qué unos son ricos y otros son pobres, por qué unos tienen mejores condiciones de vida y otros están al día, unos sin hacer nada tienen capital y otros cada día trabajan más y apenas les alcanza para medio comer. Todo eso tiene una explicación.
Desde hace muchos años, desde que la sociedad pasó de la comunidad primitiva donde la organización era en común, quiero decir era de todos los de la comunidad, trabajaban en colectivo, se distribuían los alimentos, pero se empezó a tener un excedente, surgieron personas que se aprovecharon para apoderarse de ese excedente y se pasa a la época del esclavismo, o sea, surge la propiedad privada, unos cuantos controlan las herramientas de trabajo y hacen esclavos a los que se quedan sin nada. A partir de ahí a nuestros días prevalece la propiedad privada sobre los medios de producción, siguen sometiendo a los que se han quedado sin nada, sigue la explotación.
Esta desigualdad, que surgió desde el esclavista, se ha acentuado, si vemos que hay colonias en las periferias de las grandes ciudades olvidadas marginadas, en el área rural está peor la situación, se nota más el abandonó; ejemplos hay muchos en nuestro país, pero puedo mencionar lo que se vive en Sonora, estado colindante con uno de los países más poderosos, Estados Unidos. Hay comunidades como los ejidos Baca Calderón, Nuevo San Francisco, Ortiz, entre otros, todos ellos del municipio de Guaymas, están allá olvidados en el Valle, caminos todos intransitables, polvorientos, falta de servicio de drenaje, agua potable y electrificación, sus viviendas la mayoría de adobe que cuando llueve cada día se deterioran… y no pasa nada, autoridades van y vienen, no hacen nada por mejorar la vida de estas familias, a pesar que en campaña todos dicen van a atender sus necesidades pero hasta la fecha, eso no ha sucedido.
Muchos pensamos que por vivir en un estado rico en minería, pesca, ganado, y vecino de Estados Unidos, es garantía de vivir mejor, pero eso es una vil mentira. Aquí se han venido a establecer maquiladoras para que se les explote a los mexicanos, en lugar de que se ponga industria mexicana, los gobiernos no han hecho nada, por la sencilla razón de que pertenecen a una clase social, la clase especial que representan: la de los ricos; por lo tanto, ellos solo velarán los intereses de esa clase de los ricos, los pobres que se rasquen con sus propias uñas. Para cambiar la suerte de la clase trabajadora es necesario cambiar de sistema social, donde gobierne la mayoría, para lograrlo se tiene que formar un frente común que unifique a todos los humildes y a la gente progresista que desee un México mejor, donde exista trabajo para todos y sea bien remunerado, que paguen impuestos los que más tienen, que los recursos que administra el gobierno se regresen en obra social.
Eso es a lo que debemos aspirar todos los humildes para entender que, sólo aboliendo la propiedad privada, será posible terminar con esas diferencias que hoy vemos ricos y pobres, se podrá organizar la sociedad como en la comunidad primitiva, pero en otro nivel de desarrollo, donde ya no se dé la explotación del hombre por el hombre.
Debemos reflexionar al respecto para darnos cuenta de que ahora, los momentos que estamos viviendo, con un partido de izquierda en el Gobierno de México, las cosas no han cambiado para la clase trabajadora, sigue habiendo ricos y pobres, ese abismo en lugar de disminuir se hace cada vez más grande, ahí queda claro por lo tanto que el gobierno no es de izquierda, no está con la clase trabajadora, sigue privilegiando a unos cuantos, la política implementada por Andrés Manuel López Obrador, es reflejo de una clase social a la cual representa, menos la de los pobres. Así nos debemos explicar por qué cada día hay más pobreza y marginación para la clase trabajadora.
Sólo cuando el pueblo y los ciudadanos progresistas se decidan a unirse, organizarse, concientizarse y dar la batalla hasta triunfar, poniendo en el gobierno a una estructura social que emane del pueblo, será posible que las cosas cambien, por eso hay que hacer conciencia de la situación que estamos viviendo para que se decidan a organizarse y a luchar por una patria más justa y equitativa.
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