Para nadie es desconocido el desfalco multimillonario realizado a Seguridad Alimentaria Mexicana (Segalmex), el cual supera los 15 mil millones de pesos, por irregularidades como pagos de mercancías que no tienen soporte documental, erogaciones sin acreditar, compras a empresas que no existen, salidas de efectivo injustificadas; estos son solo algunos ejemplos de las anomalías presentadas. Esta estafa representa más del triple del monto de la llamada “estafa maestra” registrada en la anterior administración federal.
Segalmex fue creada por AMLO mediante un decreto presidencial en 2019 con el propósito de favorecer la productividad agroalimentaria, y distribuir granos básicos y lácteos a la población más pobre del país. Además, dijo que con ello eliminaría la corrupción, poniendo funcionarios “honestos” que “sí harían llegar a los pobres los apoyos gubernamentales”. Los resultados están a la vista de todos.
No hace falta ir muy lejos para notar el grave daño que causó dicha estafa, y no me refiero solo a la pérdida de todos esos recursos, sino a la situación en la que se encuentran miles de familias campesinas de diversos estados. El secretario de la Organización del Sindicato Nacional Independiente de los Trabajadores de Liconsa, Francisco Cojolum, menciona que afectó a 50 mil hidalguenses, y a nivel nacional a cerca de dos millones de mexicanos pobres.
Describiré en este escrito lo que a mí me consta, la condición de vida y de hambruna en que se debaten los habitantes de la Sierra Otomí-Tepehua y la Huasteca Hidalguense. Prácticamente en todas las comunidades que se visiten no hay una familia que no se acerque a contarte lo que tienen que hacer para conseguir maíz, las peripecias que tienen que pasar para lograr llevar el alimento a sus casas porque en las tiendas comunitarias de Segalmex les condicionan la compra de maíz a causa de la escasez de grano, siendo este su principal alimento.
Hoy, que se pregona por la 4T que hay menos pobres, que gracias a sus políticas eficaces los mexicanos viven mejor, nosotros decimos que la realidad muestra otro panorama, que Segalmex al igual que otras de sus ocurrencias del presidente de la República no ha sido en beneficio de los que menos tienen
A causa de lo descrito anteriormente, el Movimiento Antorchista realizó en diversas ocasiones comisiones a Segalmex de Hidalgo para pedir atención y una solución ante tan delicado problema del que solo recibimos por parte del encargado de dicha institución un mensaje que externó sin mayor reparo “yo tengo otros datos”, “sabemos que se surte adecuadamente el grano”.
Hoy, que se pregona por la 4T que hay menos pobres, que gracias a sus políticas eficaces los mexicanos viven mejor, nosotros decimos que la realidad muestra otro panorama, que Segalmex al igual que otras de sus ocurrencias del presidente de la República no ha sido en beneficio de los que menos tienen, al contrario, han afectado severamente el bienestar de las familias no solo económica sino nutricionalmente, no hay pues, un combate serio a la pobreza.
Mientras en el país haya gente con hambre, que no le alcanza para costear un bulto de maíz y que sobrevive en condiciones de miseria tal que al verlos te cale en el alma; el pueblo en general no puede estar conforme con gobernantes y discursos oficiales que hacen oídos sordos, que dejan a su gente morir o que solo le den paliativos para medio sobrevivir, debe en primer lugar inconformarse, denunciar y concluir que esos gobiernos no son del pueblo y que es tarea de los afectados construir la verdadera alternativa de bienestar.
Debemos ser conscientes del poder de nuestro voto para lograr un gobierno encabezado por el pueblo y que trabaje para el mismo pueblo.
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