Ya son más de tres años de que Andrés Manuel López Obrador (AMLO), llegara al Gobierno federal por el Partido Morena, desde antes que tomara el poder en 2018, durante la llamada gira de agradecimiento y frente a miles de ciudadanos afirmaba que se acabaron los intermediarios, que los apoyos se entregarán de manera directa para evitar que organizaciones como la “Antorcha mundial” se queden con ellos, esto bajo la visión de que una mentira repetida se convierte en verdad.
A la llegada de AMLO quedaron atrás los escritos periodísticos anónimos y por primera vez recibimos una embestida directa del titular del ejecutivo, la acusación la hizo en más de 100 plazas públicas y desde entonces no ha cesado. López Obrador no ha sido el primero en pretender acabar con Antorcha, la lista de personajes quienes nos han atacado es larga, han usado todos los recursos, incluidos los asesinatos, pero a diferencia de otros tiempos, el de la transformación no ocupó de intermediarios, él se lanzó con todo el poder presidencial sin presentar ninguna prueba, en un acto de claro abuso de poder.
¿Y por qué tanto odio contra el pueblo organizado? Desde hace más de 47 años el Movimiento Antorchista ha encabezado las demandas apremiantes de los sectores más vulnerables de la ciudad y el campo, la tarea no ha sido sencilla, siempre hemos encontrado resistencia de los funcionarios de los tres niveles de gobierno quienes se niegan a atender las solicitudes a pesar de que nuestra labor está amparada en la Carta Magna y de tratarse de necesidades elementales.
Muchos mexicanos pusieron sus esperanzas en Morena; sin embargo, nada ha cambiado, al contrario, la fortuna de los mexicanos adinerados se ha concentrado en los bolsillos de personajes como Ricardo Salinas Pliego que es uno de los consentidos del presidente de la 4t, además ya no existen recursos para las obras que urgen en los estados y municipios por lo que estos se encuentran paralizados, solo se han convertido en pagadores de nómina. Este argumento es el pretexto perfecto para deshacerse de las obligaciones con la población, por tanto, cuando se les pide atención a problemas la respuesta es “no hay recursos”, “es mucho lo que piden”, pero todo se centra en que para los pobres nunca hay dinero.
La administración de AMLO rebasa ya la mitad del sexenio, la organización antorchista sigue firme, la lucha contra la pobreza no se detiene porque mientras exista la insultante desigualdad seguiremos al lado de los pobres, luchando a su lado, explicándoles que el abandono oficial no es parte del destino que les tocó vivir, sino que es producto de la división de las clases sociales, pero que esto se puede cambiar con la lucha del pueblo oprimido usando la vía legal y democrática.
A causa de la pandemia los problemas se han acrecentado, aún estamos imposibilitados de hacer concentraciones masivas que dan muestra de unidad, fuerza y organización del pueblo, que a pesar de la cruzada de exterminio desde el poder ejecutivo, los Antorchistas defienden su derecho a pertenecer al movimiento que les ha conducido en la búsqueda del progreso.
Congruentes con lo expuesto, el año 2022 será también de lucha para que esa riqueza social manejada por el gobierno -que es recaudada a través de los impuestos-, se devuelva a los mexicanos en obras que son urgentes y necesarias para la atención de la salud, educación, deporte y en la construcción de vialidades. Han pasado cerca de 50 años y aquí seguimos, los Antorchistas estamos seguros de que nuestra labor es necesaria para lograr un México próspero para todos, aunque desde altas esferas del poder se diga lo contrario.
Y con la finalidad de seguir promoviendo el desarrollo de las poblaciones se trabaja actualmente en la elaboración del pliego petitorio que será entregado al Gobierno del estado que encabeza David Monreal Ávila el próximo 28 de octubre; será una comisión representativa la que acudirá a la a la Secretaría de Gobierno con el fin de que el documento sea analizado y se habrá de esperar a que haya una propuesta favorable de la autoridad.
Acción similar se realiza en los distintos municipios donde Antorcha tiene presencia, de tal manera que las autoridades en las alcaldías tengan tiempo de analizar las solicitudes y den propuestas de atención, esto ya se hizo en municipios como Fresnillo, Villanueva o Vetagrande, mientras que se avanza en la integración de demandas de otras localidades como parte de las acciones de gestoría y lucha de la población organizada.
Las necesidades que se priorizan son la pavimentación de calles, la regularización de colonias populares, la introducción de redes de agua potable, la implementación de apoyos a la vivienda y al campo, entre otras. Por ello se acerca el momento de acudir respetuosamente, pero con firmeza, a exponer las carencias a efecto de que se programen dentro de las acciones a ejercer en 2022, sabemos que la lucha será larga, que habrá riesgos, pero como la pobreza se agudiza y extiende será la acción del pueblo la que defina las políticas a seguir con el estrenado gobierno de Morena en Zacatecas.
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