Cuando la bestia ya no tiene mucho por hacer para sobrevivir ante el ataque certero de su contrincante, no le queda más que recurrir a una embestida abrupta.
Esto es lo que está haciendo un personaje bastante desprestigiado de la política ixtapaluquense, Armando Corona Rivera, "líder" de una organización llamada Nexos.
Este pequeño hombre, no solo de intelecto sino también de liderazgo, cuando estuvo en el poder en Ixtapaluca no hizo nada: mientras estuvo como presidente municipal en el trienio del 2003 al 2006, lejos de llevar a este municipio al progreso y desarrollo, lo sumió en el atraso y rezago, pues los recursos que bajaban desde la Federación o del Gobierno del Estado de México nunca se vieron materializados en obras y servicios.
En el año 2006, Armando Corona Rivera fue requerido por el órgano Superior de Fiscalización del Estado de México (OSFEM) pues, de acuerdo con una nota publicada en el El Universal el 16 de octubre, solo dejó al nuevo alcalde "dos mil pesos en la tesorería local y una deuda superior a los 100 millones de pesos". Además, en la dirección de Seguridad Pública dejó "cero chalecos antibalas, ocho patrullas inservibles, 25 pistolas cortas y cuatro palos", según atestigua el diario nacional.
¿A dónde fueron a parar esos 100 millones de pesos? A once años del término de gobierno de Corona Rivera, aún no se sabe que fue de ese dinero, y el señor nunca se presentó ante el OSFEM para explicar la desaparición o bien para demostrar en qué obra o servicio fueron a parar los impuestos de los ixtapaluquenses.
Armando Corona Rivera que parece es intocable por los padrinos políticos que tiene, en el 2009 logró la candidatura para diputado federal y en el 2013 la de diputado local. Pero durante su paso por esos cargos públicos no hizo nada sustancial para Ixtapaluca, salvo las despensas que llegó a entregarle a la gente como si con ellas fuera a aliviar las miserias de los desprotegidos.
Y es que las despensas son como ponerle un parche a un enfermo de cáncer, pues lejos de combatir la verdadera enfermedad se le distrae con parchecitos para hacer como si se le estuviera combatiendo en serio.
Así, con este curriculum de político corrupto, Armando Corona ha tratado de rehacer su camino en la política - un camino que está bastante enlodado y lleno de esqueletos en el baúl- por lo que intenta a toda costa desprestigiar a quienes si han demostrado llevarpor buen rumbo Ixtapaluca.
Recientemente una de las tretas para desprestigiar a quienes han trabajado por Ixtapaluca es asegurar -ante un periódico de supuesto "renombre" como el Excelsior- a quien aseguró que los automovilistas son víctimas de constantes abusos por parte de empleados de grúas concesionadas por el municipio de Ixtapaluca.
El señor que ya fungió como presidente municipal debería saber que dichas grúas no están concesionadas por el municipio, sino por el Gobierno del Estado de México, quien decide con que grúas debe trabajar el municipio.
Las declaraciones de este viejo político mafioso se dan en un contexto en el que recientemente le fue clausurado un negocio en Ixtapaluca por no cumplir con los requerimientos de protección civil: no tenía señalamientos visibles, ni rutas de evacuación, ni extintores, ni control de desechos biológicos, ni nada.
Este seudo político que habla de respetar la ley, nunca la ha respetado, y cuando se le aplica la justicia recurre a artimañas baratas para enlodar el buen trabajo que realiza el gobierno municipal de Ixtapaluca.
Y así, entre tretas y manipulación de la gente, Armando Corona busca a toda costa recuperar su imagen en el mundo de la política y en Ixtapaluca, la cual está muy dañada.
El ansía de poder de Corona lo convierte en un ser ambicioso y sin escrúpulos que busca reconquistar lo que alguna vez tuvo, pero será difícil porque la gente tiene memoria y bien que se acuerda de cómo fue su gobierno y de todas las corruptelas que hizo, entre otras, no entregar cuentas al OSFEM.
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