Para ganar simpatías y votos es muy fácil decir lo que la gente quiere oír y prometer lo que la gente desea, aunque en el fondo nunca piense cumplirlo. Eso es más fácil que proponerle a la gente el camino difícil, pero verdadero hacia la solución de sus problemas y ponerle todo el empeño para avanzar por ese camino. El pueblo humilde quisiera remediar sus males rápido y a poco costo, por eso es propenso a creerle al merolico que le ofrece remedios milagrosos que curan todas, o casi todas, las enfermedades, pero que no curan nada en la mayoría de las ocasiones.
Algo parecido ocurrió en los últimos procesos electorales: MORENA se alzó con el triunfo electoral sin que nunca haya movido un dedo a favor de las clases populares; MORENA utilizó el recurso de prometer que sería un gobierno a favor de los pobres, de que acabaría con la corrupción, que habría acceso a la salud de primera, crecimiento económico, los delincuentes se iban a hacer buenas personas, creación de empleos, aumento salarial y, sobre todo, apoyos en efectivo como becas a los ninis, pensión para adultos mayores, sembrando vida o becas Benito Juárez para niños y jóvenes que estudian desde el kínder hasta la preparatoria.
A estas alturas ya resulta más que evidente que Morena NO CUMPLIÓ NINGUNA de sus promesas. Inclusive en los programas de entrega de dinero en efectivo tampoco ha cumplido: en primer lugar, porque las tarjetas del bienestar no les han llegado a todos los que las necesitan; además, no han sacado a nadie de la pobreza, al contrario, son cantidades tan pequeñas las que entrega que la carestía las hace polvo; en segundo lugar, porque son usados como gancho para la compra de votos
Tomemos un caso concreto. En el municipio de Chimalhuacán los morenistas ofrecieron en campaña, y siguen ofreciendo, las becas Benito Juárez en sustitución del PROSPERA. Pero veamos cómo se ha cumplido la promesa morenista: los alumnos de preparatoria, que tienen 18 años o van a cumplirlos y, por tanto, representan votos, son los únicos que han recibido becas Benito Juárez casi al 100%; sólo el 3% de los de secundaria han recibido la beca (en una encuesta realizada a 25 escuelas se encontró que de casi 3,000 estudiantes sólo 100 han recibido la beca); los de primaria casi 0% (en un encuesta realizada a 27 escuelas primarias del municipio se encontró que de 8,179 alumnos, sólo 13 reciben beca Benito Juárez); los de kínder 0%. Es decir que los alumnos que no representan votos no son tomados en cuenta. Con los gobiernos anteriores las mamás recibían becas por todos los niños que tenía inscritos, desde kínder hasta preparatoria; hoy sólo reciben beca los que van a votar. Además, el recurso ya no llega a la madre de familia para el gasto familiar, sino directo al joven, para poder manipularlo.
Evidentemente que lo que le quita el sueño a MORENA no es el bienestar de los pobres; lo que desvela a los seguidores de AMLO son sus ansias por conservar el poder, por ganar elecciones a como dé lugar, pues, eso significa poder y riqueza. Si los morenistas son capaces de venderle su alma al diablo con tal de quedarse con el hueso, de aliarse con grupos criminales, qué más da engañar a la gente con unos cuantos pesos que de muy poco sirven o de prometerle que ya llegarán sus becas, aunque éstas nunca lleguen.
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